Los Mejores sitios de mockups

Puede que a algunos de ustedes no conozcan el término mockup, pero a buen seguro que si eres un diseñador gráfico no sólo sabes qué es, sino que es más que probable que los hayas utilizado para presentarle a algún cliente como quedaría tu trabajo aplicado a unas tarjetas de visitas, carpetas, trípticos, camisetas…

Porque, al final, ese término sajón lo que viene a significar es eso, una maqueta en la que mediante una simulación encajamos virtualmente nuestros diseños en su soporte final, lo que viene de parlas para que el cliente se haga una idea bastante exacta del resultado final de nuestro trabajo.

Los mockups necesitan un poco de conocimiento de Adobe Photoshop, aunque la mecánica es tan sencilla que se aprende al vuelo. Están automatizados para que el diseño en cuestión se adapte al producto de impresión que queramos. Hace años costaba encontrar exactamente el que necesitábamos, pero actualmente es darle una patada a Google y verlos aparecer por todos los lados.

Tanto es así que existen páginas especializadas en ellos. Normalmente son sitios web que ofrecen la modalidad de descarga gratuita y la de pago. Se pueden encontrar cosas extraordinarias y gratuitas. Por otra parte, los premium suelen tener un precio más que asequible y nos ahorrarán tanto trabajo que sobradamente merecerá la pena adquirirlos.

¿Qué mockups puedo encontrar?

Buena pregunta… de extensa contestación: Para packaging, prendas de ropa, material de imprenta (desde flyers hasta pegatinas, pasando por tarjetas de visita, etiquetas…). La cosa llega a tal especialización que es posible descargarse uno de estos archivos para simular un efecto de post-impresión como el stamping o el relieve.

¿Cómo funcionan?

Normalmente, la descarga contiene, además del archivo con el mockup, un pequeño documento con las instrucciones. Visto uno, visto todos. Pongamos un ejemplo para que se entienda con más facilidad (éste es uno de esos casos en los que una imagen vale más que mil palabras).

Esta imagen corresponde a una captura de pantalla de Photoshop. Al abrir el archivo psd se nos muestran en la ventana de capas todas las que componen el documento. Normalmente el autor nos hará saber de alguna manera cuáles son editables. Si, por ejemplo, clicamos sobre la que forma la etiqueta pequeña del tarro se abrirá un nuevo documento.

Ahora es el momento de sustituir el contenido por el que queramos que figure en la etiqueta. Al guardarlo, Photoshop le aplicará los filtros inteligentes e integrará nuestra imagen perfectamente en el diseño.

En pocos minutos hemos pasado de un bote de mermelada…